COMPAÑÍA INMOBILIARIA (SCI) y el RGPD
Una Sociedad Civil Immobilière (SCI) es una forma jurídica de empresa cuyo objeto social es la adquisición, gestión, arrendamiento y venta de bienes inmuebles. Está formada por al menos dos personas físicas o jurídicas y no tiene ánimo de lucro. Los socios poseen acciones que representan su participación en el capital social de la SCI.
Una Sociedad Civil Inmobiliaria (SCI) puede estar dirigida a diferentes tipos de personas, entre ellas:
- Personas físicas que deseen invertir en bienes inmuebles, ya sea para alquiler, gestión de activos o para la transferencia de sus activos inmobiliarios a sus hijos;
- Profesionales del sector inmobiliario, como comerciantes, promotores o agentes inmobiliarios, que pueden crear un SCI para facilitar la gestión de sus activos inmobiliarios y optimizar sus impuestos;
- Familias que deseen gestionar su patrimonio inmobiliario conjunto, por ejemplo un edificio o una segunda residencia, creando una SCI familiar;
- Asociaciones o colectividades locales que deseen adquirir bienes inmuebles para el ejercicio de su actividad (locales de asociaciones, edificios públicos, etc.);
- Empresas que desean adquirir bienes inmuebles para su actividad profesional, por ejemplo para instalar su sede social o almacén.
En definitiva, el SCI está dirigido a cualquier persona física o jurídica que desee invertir en bienes inmuebles de forma colectiva, segura y fiscalmente eficiente.
La creación de una SCI presenta varias ventajas, entre ellas la facilidad de gestión y transferencia de activos inmobiliarios, la posibilidad de limitar la responsabilidad de los socios a las aportaciones de capital y la posibilidad de beneficiarse de un régimen fiscal ventajoso, en particular para las inversiones en alquiler.
Sin embargo, la creación de una SCI requiere la redacción de los estatutos, el nombramiento de un gerente y la gestión de la contabilidad. Por lo tanto, es importante informarse sobre los trámites y las obligaciones legales antes de crear una SCI.
Una Sociedad Civil Inmobiliaria (SCI) puede estar obligada a procesar diferentes categorías de datos personales en el sentido de Reglamento General de Protección de Datos (RGPD)Entre los datos personales que puede tratar un SCI podemos citar:
- Los datos identificativos de los socios, tales como su nombre, apellidos, dirección, número de teléfono, dirección de correo electrónico, etc.;
- Datos relativos a las acciones en poder de los socios, tales como el número de acciones, su valor, su fecha de adquisición, etc.;
- Datos relativos a inmuebles propiedad de o gestionados por el SCI, tales como su dirección, descripción, superficie, valor, historial de alquileres, etc.;
- Datos relativos a los inquilinos, como su nombre, apellidos, dirección, número de teléfono, dirección de correo electrónico, etc.;
- Datos bancarios de socios o inquilinos, como datos bancarios para transferencias o domiciliaciones bancarias;
- Datos relativos a la gestión contable y fiscal del SCI, tales como facturas, presupuestos, declaraciones de impuestos, extractos de cuenta, etc.
Al procesar estos datos personales, el SCI debe cumplir con las obligaciones de la RGPD En lo que respecta a la protección de datos personales, en particular en lo relativo a la recopilación, el uso, el almacenamiento y la seguridad de los datos. El SCI también debe informar a las personas afectadas por el tratamiento de sus datos personales, en particular proporcionándoles información sobre las finalidades del tratamiento, los destinatarios de los datos, sus derechos, etc.